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¿Cómo se comportará la vivienda en 2022?


Según los datos del INE, durante el mes de septiembre, hubo un total de 53.410 operaciones de compraventa de vivienda, aumentando este tipo de transacciones en un 40,6% respecto a 2020.


Estas subidas han sido constantes desde mayo, lo que augura un final de año positivo con mayor cantidad de firmas en compraventa de viviendas. ¿Qué se augura entonces para 2022? Los agentes del sector valoran los datos de este año como positivos, con una clara recuperación del sector que podrá verse también el año que viene.


Según Jesús Duque, vicepresidente de Alfa Inmobiliaria, “pensamos que este año se repetirá el patrón tradicional en el mundo de la compraventa, que señala el último trimestre del año como el más activo en cuanto a operaciones”.


Estos buenos datos también coinciden también con las buenas cifras que da el informe correspondiente al tercer trimestre de 2021 de MVGM. Concluyendo que el incremento ha sido de un 25% en el total y del 40% en vivienda nueva. Faustino García, Head of Residential en MVGM España, estima que el volumen de transacciones se mantenga a niveles similares a los vistos durante el tercer trimestre de este 2021. “Tradicionalmente es un trimestre con tirón, muchas veces empujado por las operaciones de compra en inversión”.


¿Más o menos operaciones en 2022?


El responsable de Alfa Inmobiliaria opina que todo indica que las cifras de operaciones continuarán creciendo. “Según todos los indicadores, la renta bruta disponible de los Hogares está creciendo, y parece que continuará esta senda alcista durante 2022, el bajo coste de la financiación, por debajo de la media histórica, y una atractiva rentabilidad de la vivienda por alquiler”.


Aún así reconoce que hay interrogantes, como son la aparición de unos niveles de inflación con los que no estamos habituados a pelear, un importante desequilibrio social y, en menor medida, la disminución del turismo. “No obstante, y a pesar de todo, los datos del mercado laboral más recientes han sido muy favorables y el desempleo ya acumula ocho meses de caída. Este hecho, que es clave para entender la evolución del mercado de la compraventa, nos lleva a ser muy optimistas para 2022”.


Por su parte, Faustino García cree que, una vez que la demanda acumulada durante la pandemia satisfaga, las transacciones se estabilizarán y la situación se irá por tanto normalizando. “Es en vivienda nueva donde podríamos seguir viendo altos volúmenes. Hay una realidad, y es que la vivienda nueva es el único producto que puede satisfacer los nuevos requerimientos de la demanda, que busca viviendas más confortables y con más zonas comunes, jardines, terrazas y con altos índices de ahorro energético y sostenibilidad”.


¿Van a aumentar los precios de las viviendas en 2022?


El estudio de MVGM da a conocer que el precio de compraventa de viviendas ha subido un 10% interanual en España. El incremento es generalizado en todas las Comunidades Autónomas, ¿Continuará ascendiendo? Los mismos responsables de la empresa afirman que una moderación en el número de transacciones supondrá también una estabilización de los precios. Aún así, existen riesgos reales que suban los precios como la subida de los costes de construcción por la falta de materiales y la escasez de mano de obra.


Sobre ello, Jesús Duque no cree que 2022 sea un año de grandes incrementos de precio, al menos en la vivienda de segunda mano, “otra cosa bien distinta son las viviendas de obra nueva, sujetas a vaivenes como son los incrementos de los materiales, o las dificultades para encontrar mano de obra adecuada”.


Respecto a la vivienda de segunda mano, el experto espera incrementos de no más de un 2%, sabiendo que el mercado está cada vez más polarizado.


“En conjunto, las operaciones en los últimos meses se han disparado en aquellas regiones con mayor actividad empresarial como son Madrid, Málaga, Valencia y en cuarto lugar Barcelona. Y, por supuesto, también han despegado ciudades como Sevilla, Alicante, Murcia, ciudades cada vez más atractivas para desarrollar el tipo de trabajo híbrido que se está imponiendo, y que combina presencia física en las oficinas con teletrabajo en el domicilio”.